viernes, 15 de abril de 2016

Comprar espejuelos y gafas por internet puede salir muy caro

Fuente: Cuidatuvista.com

La compra de gafas graduadas y de sol online es una opción muy poco recomendable. Se trata de un producto complejo que precisa de un asesoramiento estético y técnico personalizado para garantizar  una comodidad, estética y visión perfecta.



Estamos en crisis y todos queremos ahorrar dinero, pero no debemos hacerlo a costa de perjudicarnos estética y visualmente. Comprar unas gafas graduadas o de sol sin probarlas es algo arriesgado. Las gafas baratas te pueden salir muy caras si no las compras en una óptica donde puedes probarlas y recibir el asesoramiento adecuado.

En esta entrada se explican algunas de las razones técnicas, estéticas y de servicio posventa en las que se basa mi opinión y también se proporcionarán datos de un estudio realizado por la Escuela de Optometría de la Universidad del Pacífico (USA) en el que se encargaron 200 gafas graduadas por internet a 10 sitios diferentes. Los resultados fueron “preocupantes”, por lo que parece increíble que se permita la comercialización de gafas graduadas por internet.

 
Razones estéticas por las que siempre conviene probar las gafas físicamente antes de elegirlas:

1. Las gafas que más te gustan (en la cara de otra persona o en una foto), muy posiblemente no serán las que más te favorezcan. Según la fisonomía de tu cara te irán mejor unos tipos de gafas que otras y por eso es tan importante el asesoramiento estético por parte del profesional especializado. Incluso aunque pudieses mandar una foto para realizar una prueba virtual de la montura el resultado seguiría siendo poco fiable ya que el apoyo no se puede calcular bien mediante una foto en dos dimensiones.

2. Cada montura tiene un ancho de puente diferente (la zona donde apoya en la nariz). En función de la anchura en esa área de apoyo unas personas necesitarán gafas con más tamaño de puente y otras menos. Si el puente es inadecuado te resultará incómoda y puede quedarte demasiado alta o demasiado baja.

3. Hay determinadas graduaciones que precisan de un tipo de montura específica para que estéticamente el resultado sea mejor. Una cosa es ver la montura sin cristales y otra es imaginársela con los cristales graduados. Esto es más evidente en graduaciones altas de miopía e hipermetropía.

Razones técnicas que desaconsejan comprar gafas graduadas por internet:

Como optometrista que soy este tema es para mí una prioridad absoluta porque si la gafa que eliges no es adecuada o está mal montada puede provocar problemas de visión importantes.

1. Introducción de los valores de la graduación: Si no estás habituado es fácil cometer errores al introducir los datos de la graduación en el formulario de pedido aparte de que puedan cometer errores al interpretarlos (como verás en algunos datos del estudio que aportaré más adelante).



2. Los centros ópticos: Han de ser exactos y coincidir el centro óptico del cristal una vez montado en la gafa con el centro de la pupila de cada ojo. En el caso de cristales progresivos la tolerancia de error máxima es de 1 mm tanto vertical como horizontalmente. En el caso de cristales no progresivos la tolerancia es algo mayor y normalmente el centro optico se monta 2 mm por debajo de pupila, pero exigen igualmente una toma de las distancias interpupilares muy precisas en el meridiando horizontal. Si tienes una elevada miopía, astigmatismo, hipermetropía o presbicia este tema es todavía más importante y un buen centraje es fundamental.

3. No poder probar físicamente las gafas: Sin probar las gafas físicamente es imposible determinar de un modo minimamente fiable las alturas correctas a las que hay que montar los centros opticos de los cristales graduados. Si estos centros no están situados en la posición adecuada, pueden provocarse efectos como distorsiones, cansancio, mala visión, dolores de cabeza y un sin fin de problemas asociados.

Razones de servicio

1. Ajuste de una gafa nueva: Al llevar unas gafas nuevas se requiere realizar un ajuste de la montura en función del tipo de gafa y de cristal para buscar la inclinación adecuada, modificar la curvatura de las varillas, las plaquetas que apoyan en la nariz, etc… Como muchos usuarios de gafas sabemos no es sencillo el conseguir un ajuste equilibrado que combine comfort y buena visión a todas las distancias y la mejor forma de conseguirlo es una buena adaptación en el punto de ajuste de la óptica por parte del profesional que además comprobará antes de que las lleves que los centros opticos están adecuadamente montados.

2. Garantías y servicio postventa de las compras realizadas por internet vs ópticas físicas: Este tema es fundamental ya que las garantías que te ofrecen por la compra de gafas por internet son exclusivamente las que da el fabricante contra defecto o deterioro del producto siempre que no sea provocado por su mal uso.

No existen garantías de adaptación ni garantías estética por lo que puedes encontrarte con unas gafas nuevas preciosas que no puedas poner porque ves mal o te quedan fatal.

Por el contrario la mayoría de las ópticas te ofrecerán un servicio post-venta muy bueno con garantías de satisfacción y de adaptación en la mayoría de los casos. A mayores incluso podrás optar a seguros de rotura y descuentos en segundas compras.

De todos modos la mayor garantía es la profesionalidad y la seguridad que te da el hacer la compra de un producto que vas a usar diariamente bien asesorado por profesionales tanto a nivel estético como técnico.

Datos del estudio realizado por la Escuela de Optometría de la Universidad del Pacífico (USA):

Dicho estudio se realizó pidiendo 200 gafas graduadas por internet a 10 sitios diferentes y los resultados fueron demoledores. Estas son algunos de los datos que proporciona:

Los investigadores de este estudio encontraron que casi la mitad de las gafas graduadas que compraron en línea presentaban defectos en sus cristales. Existían desde errores tan graves como poner un cristal monofocal en lugar de uno multifocal, tratamientos añadidos u omitidos y casi un 25% no cumplieron con las pruebas de resistencia a los impactos. Este estudio fue publicado en la revista Optometry.